Si la sangre está alcalina todo el cuerpo va a estar limpio y sano. Alcalino es todo lo que es vida y lo encontramos en frutas, que aportan las vitaminas y verduras crudas, que aportan los minerales. Por su parte lo ácido es lo que hace el balance equitativo al sistema inmune, para que las células que tenemos no se autodestruyan, sino más bien se vuelvan defensas para nosotros. Lo ácido es todo aquello vivo y de origen vegetal que está seco y cocido, tal como lentejas, garbanzos, soya, arroz, trigo, cereal, harina, frijol, todo lo que ya pasó por un proceso de cocimiento o secamiento.

Ninguna persona con su sangre alcalina va a ser víctima de enfermedades contagiosas, si mantenemos el equilibrio orgánico (80% alcalino y 20% ácido) a través de una buena alimentación, lograremos estar preparados para combatir virus que se puedan desarrollar en el futuro, aunque estos sean más contagiosos o letales que el COVID-19.